El boquete (1960)

Coproducción ítalo- francesa, de J. Becker, que relata sobre un joven, inocente no obstante encarcelado, quien es sumado por compañeros de celda para la construcción de un boquete por donde puedan escapar.
Aún con tintes de film de policial y suspenso, donde cumple -cierta tensión y minuciosa descripción de los hechos que hacen al escape-, destaca especialmente por la caracterización de los personajes, dejando en evidencia cuestiones tales como la amistad, la falta de confianza, el compañerismo. El final es potente.
Muy recomendable, 8/10

Esta tierra es mía (1943)

Film del afamado cineasta J. Renoir, el cual retrata cómo la ocupación alemana afecta la vida de un par de personas, en general ellas del ámbito educativo.
Como positivo, puedo rescatar algunos conceptos generales relacionados a la libertad, dentro de un guión bien urdido, con algunas buenas actuaciones, en especial la de C. Laugthon como la del tímido. ¿La cuestión? Sin dudar de la honestidad intelectual del director, la historia finalmente suena a panfleto político, labrándose una línea de tipo discursiva que no todos necesariamente compartan.
Discreta, 5/10.

Pacto siniestro (1964)

Thriller británico del cineasta B. Forbes, que relata sobre una mujer casada que obra como medium que simula un secuestro con objeto de dar pistas y demostrar sus capacidades.
Film del género de la vieja usanza: bien contado y construido, ritmo sostenido (pese a tener su años) con secuencias de buen suspenso, todo hilvanado para desembocar en un cierre concluyente. Agregan buenas actuaciones, en especial la pareja protagónica, muy bien caracterizados.
Bastante buena, 7/10